El abogado, Doctor en derecho procesal y académico de la Universidad de Talca, envió una columna de opinión a El Centro, explicando por qué algunos Mecanismos Alternativos de Solución de Conflictos (MASC) de la Propuesta Constitucional “es más propia de una moda que no ha traducido en realidad las promesas”.
La Propuesta recoge el deber del Estado de promover y generar las condiciones para los mecanismos alternativos de resolución de conflictos, sobre la base de fortalecer el diálogo y colaboración. De otro lado, establece que el arbitraje (otro modo alternativo a la justicia estatal) será siempre voluntario y proscribe que sea forzoso.
Esta prohibición va en la línea correcta, pero no se entiende el silencio en aquellos casos donde algunos Mecanismos Alternativos de Solución de Conflictos (MASC), por ejemplo, la mediación previa y obligatoria en materia de familia, que muchísimas veces se ha traducido sólo en un obstáculo para el acceso a la Justicia, en personas de escasos recursos que acuden a esa vía para obtener el certificado de mediación frustrada y con ello poder demandar (y poder “molestar” con su caso a los tribunales).
La Propuesta perdió oportunidad de alejarse de esta lógica que rodea a los MASC, es más propia de una moda que no ha traducido en realidad las promesas.
Diego Palomo, Abogado, Doctor en Derecho Procesal y académico UTALCA.
